Hace pocos días cuando por las leyes físicas de la propagación del sonido, mis oídos capturaron la palabra I2COM, recordé la maravillosa aventura que ocurrió en este evento de la convergencia móvil en tierras vallunas. Tal vez parezca cuentero al querer narrar esta historia en cuanto foro encuentre, pero es una aventura que merece no ahorrarse ni una coma.
Todo comenzó cuando mi amigo Andres Pachajoa irrumpió en la sala 334 con la maravillosa noticia de aquel evento, el cual fue soportado y validado por otros eventos a los que el había asistido, y que le daban esa jerarquía de jugador experimentado, de jugador que se merecía la cinta de capitán para orientar ese barco de Expreso Palmira con destino a tierras norteñas.
El buen amigo Pachajoa nos garantizo comida, bebida y transporte económico, todo ello bajo su batuta y con el prestigio de la empresa que representaba: "Pachajoas's Travel Group". De esa manera nos dijo claramente "Me llaman un día antes y no se preocupen que conmigo viajan seguros". Así inicie una campaña proselitista convenciendo a cuanto fulano entrara en el aula máxima (sala 334), de que la convergencia móvil era un tema de interés nacional y que el no asistir, seria como ausentarse de la maratón de San Silvestre para un atleta de alto rendimiento.
Como fruto de aquella campaña logre reunir un ejercito de 8 superamigos con poderes limitados y escondidos, muy escondidos, los cuales me dieron tranquilidad porque comenzaron a hablar de Cali, de la calle 5, de las mujeres, del zoologico, en fin; llegada la fecha acordada por Pachajoa decidí a marcar su numero, pero "Oh sorpresa", cuando después de las palabras de protocolo le pregunte: ¿Como vamos hacer con lo del viaje Pacha?, a lo que el muy necio me dijo: "Gabriel que pena pero ya estoy acá en Cali donde una amiga", un cruce de sentimientos de negligencia, rabia y puños muchos puños fueron la respuesta. Mis amigos que veían en mi un Manager cual Pibe Valderrama del Junior, me hicieron cara de pocos amigos.
A lo lejos se escucho una voz que dijo: "Yo les dije que ese Pachajoa es puro tilin tilin", era la voz del capitalizador nato de situaciones incomodas, de aquel personaje que esta listo en el arco contrario esperando que el cancerbero salga a cazar mariposas para definir, ignorando lo anterior el grupo de 8 superamigos reunido en claustro decidió madrugar al otro día al terminal e iniciar la aventura de sobrevivir por una noche en la ciudad de Cali, sabiendo que todos hablaban de la calle 5, del zoológico y de otras cosas.
Todo comenzó cuando mi amigo Andres Pachajoa irrumpió en la sala 334 con la maravillosa noticia de aquel evento, el cual fue soportado y validado por otros eventos a los que el había asistido, y que le daban esa jerarquía de jugador experimentado, de jugador que se merecía la cinta de capitán para orientar ese barco de Expreso Palmira con destino a tierras norteñas.
El buen amigo Pachajoa nos garantizo comida, bebida y transporte económico, todo ello bajo su batuta y con el prestigio de la empresa que representaba: "Pachajoas's Travel Group". De esa manera nos dijo claramente "Me llaman un día antes y no se preocupen que conmigo viajan seguros". Así inicie una campaña proselitista convenciendo a cuanto fulano entrara en el aula máxima (sala 334), de que la convergencia móvil era un tema de interés nacional y que el no asistir, seria como ausentarse de la maratón de San Silvestre para un atleta de alto rendimiento.
Como fruto de aquella campaña logre reunir un ejercito de 8 superamigos con poderes limitados y escondidos, muy escondidos, los cuales me dieron tranquilidad porque comenzaron a hablar de Cali, de la calle 5, de las mujeres, del zoologico, en fin; llegada la fecha acordada por Pachajoa decidí a marcar su numero, pero "Oh sorpresa", cuando después de las palabras de protocolo le pregunte: ¿Como vamos hacer con lo del viaje Pacha?, a lo que el muy necio me dijo: "Gabriel que pena pero ya estoy acá en Cali donde una amiga", un cruce de sentimientos de negligencia, rabia y puños muchos puños fueron la respuesta. Mis amigos que veían en mi un Manager cual Pibe Valderrama del Junior, me hicieron cara de pocos amigos.
A lo lejos se escucho una voz que dijo: "Yo les dije que ese Pachajoa es puro tilin tilin", era la voz del capitalizador nato de situaciones incomodas, de aquel personaje que esta listo en el arco contrario esperando que el cancerbero salga a cazar mariposas para definir, ignorando lo anterior el grupo de 8 superamigos reunido en claustro decidió madrugar al otro día al terminal e iniciar la aventura de sobrevivir por una noche en la ciudad de Cali, sabiendo que todos hablaban de la calle 5, del zoológico y de otras cosas.
Las aventuras del viaje, la estadía y otras cosilla serán tema de otra entrada, así que como cualquier película, manifiesto la palabra clásica:
Continuara...............
3 comentarios:
Esto me recuerda a los capítulos piloto de algunas series exitosas: te dejan iniciado y queriendo saber qué pasará en el futuro. Y fresco, que Pachajoa (alias Pacho Jojoa) siempre ha sido así.
Ah, y este no es un mensaje de prueba...
En primer lugar quiero felicitar al autor de la historia, sé que Gabriel tiene criterio y domina aquello que llamamos ética por eso respeto su punto de vista, y en segundo estaré esperando el siguiente capítulo.
Andrés Pachajoa Rodríguez.
PD: ¿Existen pruebas de aquello que se me imputa?, je je
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